Cómo preparar Hard Kombucha: tu burbujeante viaje hacia la Kombucha divertida 🍃🍾

¿Alguna vez soñaste con una kombucha que, además de ser viva y burbujeante, tenga un pequeño empujoncito festivo?

Hoy te invito a descubrir cómo preparar Hard Kombucha en casa: una bebida que conserva el alma probiótica de la kombucha, pero con un toque extra de alegría líquida.

El secreto está en entender a nuestros pequeños aliados -las levaduras-, darles más alimento (azúcar) y crear un ambiente donde puedan hacer su magia sin interrupciones.

¿Qué sucede en esta transformación?

En la kombucha tradicional, las bacterias consumen casi todo el alcohol generado por las levaduras, transformándolo en ácidos orgánicos. Pero si aumentamos la cantidad de levadura y azúcar, y limitamos el oxígeno... el alcohol puede quedarse a vivir en la bebida.

Así nace nuestra Hard Kombucha: más intensa, chispeante y vibrante.

Ingredientes y herramientas para tu aventura (rinde 3 litros):

• SCOBY y líquido activador (o kombucha madura): 500 ml

• Levadura seca: de Cerveza (SafAle US-05): 1.5g–2.5g o de vino / champagne (Lalvin EC1118): 1g

• Té verde, negro o mezcla: 15–24 g

• Azúcar blanca o rubia: 500 g (250 g para cada fermentación)

• Agua sin cloro: 3 litros

• Frasco de vidrio con paño y liga para la primera fermentación

• Adaptador para tu frasco con airlock.

• Botellas herméticas para la tercera fermentación

• Opcional: Hidrómetro para medir el grado alcohólico.

Para dar tu toque personal, puedes añadir purés de frutas, hierbas, especias o raíces en la etapa final.

Paso 1: Primera fermentación - Despertar el cultivo

• Prepara el té infusionándolo entre 10 a 15 minutos con 1 litro de agua.

• Cuela y mezcla con 250 g de azúcar hasta disolver.

• Agrega el resto del agua fría (hasta completar 3 litros).

• Añade el SCOBY y su líquido activador.

• Cubre con un paño y deja fermentar en un lugar ventilado, fuera del sol.

Importante: No dejes que esta fermentación sea muy ácida. Mantén el proceso entre 7 a 10 días. Queremos una kombucha joven, lista para recibir a las nuevas levaduras.

Paso 2: Segunda fermentación - El ritual del alcohol

• Retira el SCOBY y guarda tu cultivo en un hotel de SCOBYs.

• Hierve 250 ml de agua, disuelve 250 g de azúcar y deja enfriar.

• Agrega la levadura seca, mezcla, y deja reposar de 15 a 30 minutos.

• Mezcla este elixir dulce con tu kombucha base en un fermentador con airlock.

• Deja fermentar de 10 a 14 días a temperatura ambiente, sin exposición al aire.

Aquí la magia sucede: Las levaduras bailan libres, transformando el azúcar en alcohol mientras las bacterias duermen.

¡Brinda por tu primera Hard Kombucha!

En este punto, ya tienes una kombucha con un perfil alcohólico interesante.

Puedes disfrutarla tal cual, o seguir el camino de la creatividad...

Paso 3: Tercera fermentación - Sabor y burbujas vivas

• Añade frutas, especias, raíces o hierbas para crear tu propia firma de sabor.

• Deja infusionar entre 12 y 24 horas.

• Cuela si deseas, embotella en botellas herméticas y deja fermentar de 2 a 4 días.

• Finalmente, refrigera para detener la fermentación y preservar el equilibrio perfecto entre dulzor, acidez, alcohol y burbujas.

Consejos burbujeantes

• Mide tu fermentación (opcional): Si tienes hidrómetro, puedes medir el grado alcohólico en cada etapa.

• Explora sabores: Anís, jengibre, frutos rojos, menta… el cielo es el límite.

• Paciencia y cuidado: Observa las botellas y no las sobrefermentes para evitar explosiones de felicidad (y líquido).

Un brindis a la naturaleza y a la alquimia.

Crear Hard Kombucha en casa es un acto de intuición, paciencia y celebración.

Una forma de reconectar con el arte antiguo de la fermentación... pero también con la alegría de crear algo profundamente tuyo. Así que abre tu frasco, escucha el susurro de las burbujas, y brinda:

Cada viaje, cada sabor, cada historia... empieza con una fermentación.